Salmos 92

Bueno es alabarte, oh Jehová, Y cantar salmos a tu nombre, oh Altísimo; Anunciar por la mañana tu misericordia, Y tu fidelidad cada noche.

Proverbios 4:18

Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, que va en aumento hasta que el día es perfecto.

Salmos 138

Te alabaré con todo mi corazón... a tí cantaré salmos...

Isaías 26:3-4

Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado. Confiad en Jehová perpetuamente, porque en Jehová el Señor está la fortaleza de los siglos

Isaías 40:31

pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán

miércoles, 30 de mayo de 2012

2 + 2 = 4,000

“En la dimensión de Dios, por así decirlo, encontramos un ser que es tres personas, mientras sigue siendo un Ser, del mismo modo que un cubo es seis cuadrados mientras sigue siendo un cubo.”
C. S. Lewis – Mero Cristianismo

Muchos tratamos de comprender a Dios y como es que Él actúa, autores mucho mas diestros que yo han escrito decenas de libros sobre este tema, la Teología ha intentado por siglos explicar y dar solución a estos temas, sin embargo mas de dos mil años después de la encarnación de Cristo en este mundo aún seguimos sin entenderle por completo ni a Él ni a su forma de hacer las cosas.

En publicaciones anteriores dije que si bien es cierto es  imposible entender totalmente a Dios, cuando intentamos con todo nuestro corazón hacerlo estamos cumpliendo su propósito y deseo, aquí es donde radica el problema de muchos que comienzan en los caminos del Señor y que luego al ver lo intrincado de pensamiento cristiano tiran la toalla al no lograr comprender a Dios habiéndolo procurado de corazón, que debido a nuestra naturaleza caída no podemos acercarnos a Dios por mas que lo busquemos o deseemos, solo podremos conocerle si Él se presenta ante nuestros ojos, y aún si Él se presentase ante nosotros podría ser que como aquellos discípulos camino a Emaús no le reconozcamos.

No debemos amedrentarnos ante la dificultad que representa el entender la forma de actuar de Dios, la Biblia nos presenta la historia de un hombre Llamado Job que sufrió muchas pruebas muy grandes en su vida y sin embargo nuca negó la fe, pues confiaba plenamente en Dios, al final del libro Job dice lo siguiente “Yo conozco que todo lo puedes, Y que no hay pensamiento que se esconda de ti. ¿Quién es el que oscurece el consejo sin entendimiento? Por tanto, yo hablaba lo que no entendía; Cosas demasiado maravillosas para mí, que yo no comprendía. Oye, te ruego, y  hablaré; Te preguntaré, y tú me enseñarás.” Job entendió que solo por medio de la fe es posible conocer a Dios de cerca.

Solo confiando en que el Maestro tiene el control de todo podremos ver cuál es su verdadero propósito para nuestras vidas, solo dejando todo en manos de Él podremos en algún momento que el estime conveniente su verdadera voluntad para nuestras vidas, debemos tener presente, no importa la circunstancia que estamos viviendo que su deseo nunca será dañarnos, nunca será causarnos mal, Job fue bendecido de una enorme y extraordinaria manera luego de la prueba que soportó y nunca más se puso en duda su fe y amor por Dios.

La naturaleza de nuestro Dios es tan gloriosa y magnifica que escapa de lo que nuestras humanas mentes pueden entender, para nosotros en este plano existencial en que vivimos dos más dos será siempre cuatro, pero para Él dos más dos puede ser tanto cuatro como cuatro mil, pues de la nada hace maravillas incontables, es nuestra fe y confianza en nuestro Señor la que determinara si recibimos cuatro o cuatro mil, debemos como hizo Eliseo con su siervo orar para que el Señor abra nuestros ojos y podamos comprender lo que está mas allá de la vista, roguemos a Dios que se presente ante nuestros ojos y nos muestre su voluntad, pues aunque pueda ser que aparentemente no nos responde, o bien no comprendamos lo que nos muestra tenemos por seguro que todo será para nuestra bendición.


“Detrás y delante me rodeaste, Y sobre mí pusiste tu mano. Tal conocimiento es demasiado maravilloso para mí; Alto es, no lo puedo comprender.”
Salmos 139: 5-6

Twitter Delicious Facebook Digg Stumbleupon Favorites More